Economía biomimética: «la inteligencia del hormiguero»

Modelos de negocio, auto regeneración y auto regulación de las corporaciones.

En el escenario actual, estudios sobre la salud del planeta  relatan la utilización de nuestros recursos naturales que incluye 200 millones de toneladas de polución atmosférica cada año, aproximádamente, junto con 90 mil toneladas de polución nuclear; lo cual envenenará el ambiente en los próximos 100 mil años. La producción industrial de metales pesados como plomo, cadmio, zinc, arsénico y mercurio es dos veces mayor que la producción natural de estos elementos; en el caso específico del plomo, 18 veces mayor. No es apenas el tamaño de los números que asusta, más si la velocidad con que aumentan. Considere que la producción de la economía mundial crece  exponencialmente.

En contrapartida, los mismos estudios delatan una consciencia a favor del Eco Business, Eco Performance, señalando nuevos valores que impulsan demanda de certificaciones, tecnologías y perfil corporativo que conlleva a estrategias para remodelar los negocios en el contexto de responsabilidad social, empresarial y desarrollo sustentable como factor crítico de éxito (1) en la arquitectura de un plano mercadológico eficaz.

Un entorno donde finalmente la complejidad e interdependencia es reconocida en la búsqueda por soluciones de esencia. Porque actuar como mecanismos fragmentados ya  no funciona, y el camino ecológico para la producción de bienes y servicios se está tornando una práctica común y está siendo a los pocos diseminada por todo el planeta, con el objetivo de la preservación de nuestros medios de supervivencia. El mercado global de productos y servicios ecológicos es de aproximadamente 300 billones de dólares y aumentando año tras año.

Entonces…

Después de 100 años inmersos en la revolución industrial se percibe que el mundo construido no está aislado del mundo natural; el mundo está íntimamente conectado al mundo natural.

Nuevamente, 3,8 billones de años de evolución de los procesos naturales para la preservación de las especies y su hábitat nos enseñan a través de la biomimética cómo administrar los negocios sosteniblemente.

¿Un movimiento? 
¿Una línea de pensamiento?
Simplemente la naturaleza como modelo y mentor.

La biomimética va mas allá de productos y procesos científicos y tecnológicos; la biomimética es ahora en la gestión del conocimiento y ejecución eficiente de la innovación y emprendimiento creativo reconstructivista y no estructuralista; gestión con visión de futuro dentro del marco de la sustentabilidad.

Grandes profesionales de todas las áreas coinciden en que la biomimética ultrapasará la biología molecular, consolidándose «como la más desafiadora e importante ciencia biológica del siglo XXI», alineada con la preocupación energética y ambiental que garantice nuestra sobrevivencia.

Fina observación de millares de reacciones químicas, físicas y mecanismos de las especies naturales que están interconéctadas en redes a través de ciclos que nos conducen a la comprensión de que la realidad es compleja y no fragmentada, que todo es interdependiente.

Conceptos de la biología como re entropía (reposición de energía), homeóstasis (equilibrio dinámico de los sistemas) y diferenciación (donde toda acción tiene como objetivo el equilibrio del sistema y lo diferencia de los demás) pasan a ser utilizados para permitir un análisis profundo de las organizaciones, permeando una cultura con foco en la inteligencia colectiva de las redes de comunicación que incorporarán nuevas prácticas de arquitectura y diseño organizacional que proyecten un eco desempeño con carácter multidimensional.

Un reconocimiento de los sistemas vivos, como fuentes de 

la innovación inspirada en la vida,

 y ejemplo para la incorporación de  modelos de creación del ADN, autoregeneración y autoregulación de las corporaciones.

Varias empresas con foco en «para el consumidor y el planeta» están validando el concepto de la biomimética y métodos de producción de valor para financiar los costos de un nuevo producto sustentablemente correcto. Esa nueva etapa de financiamiento es fundamental para la innovación.

Metodológicamente hay una relevante necesidad de puntualizar ideas con el mínimo riesgo posible, transformándolas en resultados concretos, para lo cual debe considerarse la cuantificación, ciencia e implementación de nuevos indicadores multidisciplinares para Eco Business donde smart is the new green.

¿Cómo transformar una cultura organizacional con foco en resultados de corto plazo, en un ambiente con enfoque en futuro de resultados inciertos? ¿Cómo equilibrar crecimiento e innovación con seguridad y previsiones? Hablamos de un cambio cultural y paradigmático que exige mucha capacidad reflexiva, aprendizaje organizacional y visión sistémica.

Con base en las soluciones que la naturaleza proporciona siempre centrada en su objetivo principal: equidad, abordemos las learning opportunities o “la inteligencia del hormiguero».

Idealizar, estructurar y operar con diferenciación y liderazgo, en permanente estado de monitoreo y cambio, considerando que las innovaciones son capaces de generar ventajas competitivas y garantizara el futuro y la preservación.

En la gestión de negocios, la biomimética contempla una visión y misión referente al centro de la inteligencia colectiva en la arquitectura organizacional; la concepción del hombre multifuncional y procesos multi-conectados que incorpora auto-regeneración y auto-regulación, y conlleva a la diseminación del conocimiento existente, nutriendo y estimulando la organización y mercados. Similares a aves que no tienen líder, pero siguen reglas simples que tienen que ver menos con toma de decisiones que con la coordinación precisa de las responsabilidades.

En este abordaje se integra la ciencia natural y social orientada al encuentro de la búsqueda por la unidad de la ciencia y la interacción con el medio ambiente. Donde la estructura orgánica de la red en la era del conocimiento está orientada a un ambiente de negocios bien diferente; donde el cumplimiento de los objetivos depende de la participación y liderazgo de cada uno; se llama

la inteligencia del hormiguero o inteligencia colectiva en las redes de comunicación y gestión.

El surgimiento de este tipo de inteligencia está asociado a una cuestión fundamental en la naturaleza. Los científicos describen este tipo de sistemas como auto-organizados.

Esta inteligencia del hormiguero funciona con reglas simples donde cada colonia actúa con base en informaciones locales, que son aprovechadas para crear procedimientos matemáticos y algoritmos -hoy conocido como Quimiometría- destinados a la solución de problemas cotidianos muy complejos, tales como transporte, logística, comunicaciones y problemas en los modelos de organización empresarial, social y administración de variables.

Los miembros diversificados con opiniones propias siempre recurrirán a algún mecánismo para llegar a una decisión colectiva

Demostrando, al mimetizar, la capacidad de modelos auto-organizados y donde la conducta de la inteligencia del hormiguero, con sus elementos de comportamiento inteligente de grupo -control descentralizado, reacción y referencias locales, reglas prácticas-, acaban por formar una eficiente estrategia para una gestión de situaciones complejas con un comportamiento solidario e interdependiente de una evolución sustentable que abarca los tres vectores fundamentales: crecimiento económico, equidad social y equilibrio ecológico de injerencia en la nueva era del conocimiento.

En la biomimética, el camino de vuelta es la exploración de las inmensas fortalezas naturales, donde el éxito está en PERFECCIONAR, «OBSERVAR» y EJECUTAR.